Estas fuentes de agua caliente, ricas en minerales, son el escenario perfecto para practicar yoga y reconectar con uno mismo.
¿Por qué combinar termas y yoga?
Las aguas termales no solo son beneficiosas para el cuerpo, sino también para la mente. Sus propiedades terapéuticas ayudan a aliviar el estrés, mejorar la circulación y relajar los músculos.
Al combinarlas con la práctica de yoga, se potencia la sensación de bienestar, permitiendo una conexión profunda entre el cuerpo, la mente y el entorno natural.
Además, Chile cuenta con una gran variedad de termas ubicadas en entornos impresionantes, desde la Cordillera de los Andes hasta bosques nativos, lo que convierte a este país en un destino ideal para los amantes del turismo wellness.
Los mejores destinos de Chile para termas y yoga
1. Termas Geométricas (Región de La Araucanía)
Ubicadas en medio de un frondoso bosque, las Termas Geométricas son famosas por su diseño arquitectónico único y sus más de 60 pozones de aguas termales.
Este lugar es ideal para practicar yoga al aire libre, rodeado de naturaleza y el sonido relajante del agua. Además, sus aguas ricas en minerales son perfectas para relajar el cuerpo después de una sesión de yoga.
2. Termas de Chillán (Región de Ñuble)
Ubicadas en la Cordillera de los Andes, las Termas de Chillán ofrecen una experiencia única con sus aguas termales naturales y vistas impresionantes.
Aquí puedes combinar la práctica de yoga con actividades al aire libre como senderismo o esquí en invierno.
Muchos centros wellness de la zona ofrecen retiros de yoga y meditación, aprovechando las propiedades relajantes de las aguas termales.
3. Termas de Puyuhuapi (Región de Aysén)
En el corazón de la Patagonia chilena, las Termas de Puyuhuapi son un paraíso para quienes buscan desconexión y tranquilidad. Rodeadas de fiordos y bosques, estas termas son ideales para practicar yoga en un entorno natural único.
Además, el lodge ubicado en el lugar ofrece programas wellness que incluyen sesiones de yoga y acceso a las termas.
4. Termas de Puritama (Región de Antofagasta)
Ubicadas en el desierto de Atacama, las Termas de Puritama son un oasis de aguas termales que contrastan con el árido paisaje del norte de Chile.
Este destino es perfecto para quienes buscan una experiencia de yoga y relajación en un entorno único. Las aguas, que fluyen a 33°C, son ideales para aliviar tensiones y preparar el cuerpo para una sesión de yoga revitalizante.
5. Termas de Cauquenes (Región de O’Higgins)
A solo dos horas de Santiago, las Termas de Cauquenes son un destino accesible para quienes buscan un escape rápido de la ciudad.
Con aguas termales que superan los 40°C, este lugar es perfecto para combinar relajación y yoga.
Además, su entorno montañoso y su historia (son las termas más antiguas de Chile) lo convierten en un destino con mucho encanto.
Beneficios de practicar yoga en aguas termales
- Relajación muscular: Las aguas termales ayudan a relajar los músculos, preparando el cuerpo para una sesión de yoga más efectiva.
- Reducción del estrés: La combinación de yoga y aguas termales promueve la liberación de endorfinas, reduciendo el estrés y la ansiedad.
- Conexión con la naturaleza: Practicar yoga en entornos naturales como las termas fomenta una conexión profunda con el medio ambiente.
Tips para planificar tu viaje
- Investiga los programas wellness: Muchos centros termales ofrecen paquetes que incluyen yoga, alojamiento y acceso a las termas.
- Lleva el equipo adecuado: No olvides tu mat de yoga, ropa cómoda y una botella de agua.
- Reserva con anticipación: Algunas termas, como las Geométricas, son muy populares, por lo que es recomendable reservar con tiempo.